Description
Patagonian Stone Reflected in Holography
Imagine a geological relic, a Patagonian stone, torn from the most remote and ancestral corners of the earth. This stone, emblematic of the untamed natural beauty of Patagonia, has been carefully split in half, revealing a millennia-old story within its core.
On one side, its rough and rugged surface, witness to the passage of time, the erosion of winds and rains, and the constant pulse of the earth. On the other, a mirror of modernity: multiple layers of glass meticulously joined together, refracting light into a holographic spectrum, creating a play of colors and reflections that dance with every movement, with every shift in light.
The base, also formed by layers of holographic-toned glass, not only serves as a support, but elevates this work to an unparalleled artistic dimension. It’s a perfect contrast between the old and the modern, between the natural and the manufactured.
This piece is not just an object, it’s a statement. It’s art in its purest form. Wherever it’s placed, it will not only attract glances but will transform the space, turning it into a stage where the history of the earth meets human innovation. It’s impossible to walk by without being drawn to its magnetism, without wanting to get closer and touch it, feel its texture, get lost in its reflection.
In short, this Patagonian stone, with its fusion of holographic glass, stands as a testament to the majesty of nature and human ingenuity. A unique piece that enriches and highlights the beauty of any place in which it rests.
Daro
7.68×5.51 inches
19,5cm x14cm
Piedra Patagónica Reflejada en Base Holografía
Imagina una reliquia geológica, una piedra patagónica, arrancada de los rincones más remotos y ancestrales de la tierra. Esta piedra, emblema de la indomable belleza natural de la Patagonia, ha sido cuidadosamente cortada a la mitad, revelando una historia milenaria en su núcleo.
Por un lado, su superficie áspera y rugosa, testigo del paso del tiempo, de la erosión de los vientos y las lluvias, y del pulso constante de la tierra. Por el otro, un espejo de modernidad: varias capas de vidrio meticulosamente unidas, que refractan la luz en un espectro holográfico, creando un juego de colores y reflejos que danzan con cada movimiento, con cada cambio de luz.
La base, formada también por capas de vidrio de tono holográfico, no solo sirve de soporte, sino que eleva esta obra a una dimensión artística sin parangón. Es un contraste perfecto entre lo antiguo y lo moderno, entre lo natural y lo manufacturado.
Esta pieza no es solo un objeto, es una declaración. Es arte en su forma más pura. Dondequiera que se coloque, no solo atraerá miradas, sino que transformará el espacio, convirtiéndolo en un escenario donde la historia de la tierra se encuentra con la innovación humana. Es imposible pasar por su lado sin sentirse atraído por su magnetismo, sin querer acercarse y tocarla, sentir su textura, perderse en su reflejo.
En definitiva, esta piedra patagónica, con su fusión de vidrio holográfico, es un testimonio de la majestuosidad de la naturaleza y la ingeniosidad humana. Una pieza única que enriquece y resalta la belleza de cualquier lugar en el que repose.
Daro.
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